sábado, marzo 13, 2010

Tratando de gritar en silencio

Al parecer el mundo gira.
Es curioso cómo uno piensa que se encuentra detenido en el tiempo y de repente la realidad da un salto y lo sitúa en anegaciones.
(En la otra orilla brillaba un glaciar).

El más justo sinónimo del silencio es el terror. La certera consecuencia del designio karmático. El ombligo que ya no se divisa.
(Transpolando sus pelusas a los ojos).
El accidente vaticinado.

Miéntras la copa se vacía, y uno sabe que en el fondo sólo existe vacío. El lugar más visitado, se evidencia en la partida.
Desterrada y pública,
de este imbécil errante.


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