martes, enero 03, 2006

El lago sobre el río en el cielo

Luego de tensionarse por estarse en retención, arroya sus diques.
Esto es un cambio de situación, pues las micro dimensionales contaminaciones comienzan a desaparecer.
Es emprendimiento, distinto buscar. Sin ocultar (tapar) o vestir locuras.

Y se distribuye así lo que hasta entonces se guardo en canastas y cajones, en las ganas mismas.
Es energía determinante, el principio creativo en eterna atención.
Latiendo. Participa de una fecundación, aquella del nuevo paso o manera.

Una flor de cardo seco apunta inquebrantable a la esperanza.
La imitación implicaría servidumbre, repetirlo también.
No hice tales cosas, solo seguí pedaleando la trunca bicicleta en calles de tierra, frías por el invierno y el viento sur y ahí cedí ese paso de ruedas ante la maravilla en flor marrón.

Suspirando insomne, un preámbulo, un presagio que se tradujo en picazones y cosquillas.
El pasto no estaba seco aún, burbujas desprendidas de una burbuja.