acostado, al costado del aparato de soñar
que te robé en vísperas de una navidad.
es tan deforme que a veces tengo ganas
de deshacerme de él, pero soy incapaz.
a veces siento a la policía tras de mi,
por eso ya casi no salgo a vivir.
me siento a mirarlo y tomo café,
trato de adivinar que habrá soñado.
¡cuánta sangre ha brotado!
ya no sé lidiar con el insomnio que me
provoca
tu aparato de soñar.
algo me hace conservarlo.
cómo si no existiera nada más,
una soga que me ata a la consciencia.
para no matarme.
para no olvidar.
es lo único que me queda de vos.
un aparato de soñar, en formol.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario